El calor se va haciendo cada dia más presente. En esta época dedicamos gran parte de nuestro tiempo a pasear y leer al aire libre y los que tenemos el mar cerca nos gusta disfrutar del frescor de la playa.
Hoy ha hecho un poco de viento. Es algo frecuente en nuestras costas. A pesar de ello se estaba bien. Cuando estoy en la playa, suelo dejar un rato la lectura y contemplo el color del mar o del cielo. Me quedo un poco en off, sintiéndome parte del azul y sin pensar en nada.
Esto me ha recordado el trabajo del profesor Marcus Raichle, que hace unas semanas fue entrevistado por Eduardo Punset. Este doctor comentaba que en sus últimos estudios sobre el consumo energético de nuestro cerebro había llegado a la muy interesante conclusión de que la mayor parte de este consumo se produce en los momentos en que no pensamos.
A través de tecnicas de neuroimagen se ha visto que las áreas del hipocampo, encargadas del recuerdo, juntamente con las areas prefrontales que gestionan la decisión y planificación, presentan un gran aumento de actividad sináptica, de forma que se diría que de alguna manera estas zonas dialogan entre sí ordenando nuestros pensamientos y planificando nuestra conducta con base en nuestros conocimientos y pasadas experiencias.
Cuando dejamos de pensar es cuando ellas trabajan, ordenan, seleccionan, deciden y de esa forma van construyendo nuestro mundo. Ya en el 1890 Wilian James decia que tan solo el 10% de la información que procesa nuestro cerebro procede del exterior, siendo el resto construido por él.
Tal vez en la visión que tenemos de la vida, nuestros aciertos y desaciertos en parte sean decididos por estas neuronas que trabajan mientras nosotros de alguna forma dormimos...
"Hacer sin hacer, es la gran virtud" (Libro del Tao)
8 comentarios:
Vaya... Me he quedado en blanco.
:)
Es quizás por ello que hay que comerse menos el tarro y dejar que las neuronas, la vida, el tiempo, el color azul del mar, el verde del campo, una sonrisa.... hagan el trabajo duro: pensar.
Un besote
Que increible la ciencia. nos queda tanto por aprender. Incluso es tan poetico...
Saludos
Es una idea, que me resultó curiosa, realmente cuando no pensamos, (objeto de cualquier tipo de meditación)es precisamente cuando nuestro cerebro se pone a trabajar,a ordenar todos los estímulos recibidos a lo largo del día.Por ello estas personas que están continuamente pensando en todo, preocupandose de todo y queriendo controlar todo, acaban agotando a las neuronas,y no salen de sus crisis. gracias un abrazo.
Éste es un tema que traté en un comentario en el blog de Punset. Parece que el rendimiento intelectual de una persona o su creatividad tiene que ver muy mucho con la actividad del inconsciente y el sueño. De ello dieron prueba Einstein (decía resolver los problemas mientras dormía), Newton (halló el problema de la gravedad mientras dormitaba bajo un manzano), a F. Kekulè se le reveló la estructura química del benceno en un sueño. El gran matemático Poincare también dio gran importancia al inconsciente en la resolución de problemas intelectuales. Por lo demás, se sabe que el sueño está relacionado con periodos de aprendizaje. Y creo que casi todos hemos tenido la experiencia de hallar una respuesta (por ejemplo recordar el nombre de un amigo) tras despertar por la mañana.
Ahora bien, creo que una cosa es obvia: es necesario calentarse bien la cabeza, y luego, como bien dices, Mercedes, saber desconectar. En este juego de tensión y distensión neuronal quizá resida parte del misterio de la creatividad.
Un cordial saludo a todos.
Gracias por vuestros comentarios,
Mosquito, :)estas en blanco? que listorro eres....
Jesús,a veces nos empeñamos en hacerlo todo "nosotros" sin dejar a ellas trabajar...
David, como ves, hasta las neuronas, son poéticas, me ha gustado ese calificativo, gracias.
Raus,como sabes siempre me ha interesado el cerebro, o como diría nuestro amigo -Por qué somos como somos- Cuando yo estudiaba se conocía todo esto bastante mal,una neuroanatomia descriptiva, y una neurofisiologia en pañales, me encanta ver como vamos conociendo cosas, ya que del resto de nuestros órganos sus funciones ya eran conocidas, el cerebro siempre ha sido el gran desconocido, hasta en la medicina Tradicional China, al cerebro le llamaban " La víscera curiosa" , que realmente no deja de ser curiosa y no se cansa de sorprendernos.
Un saludo a todos.
Saludos a todos.
Desconectados del exterior, la mente maneja más recursos para otros temas "a su aire". Debe ser parecido a lo que hacen los ordenadores cuando no los estamos usando.
Por otra parte, David, igual que el arco iris está en nosotros (fuera solo es luz), la poesía también.
Gracias y de nuevo saludos.
Mi experiencia dice que nuestros desaciertos son desobediencias a las conclusiones tomadas en estos momentos de lucidez inconsciente. Creo que el dormir nos permite ordenar nuestras preferencias. Hay que intentar aprender incluso de los sueños más absurdos. Es una información personal e intransferible, sólo nos sirve a nosotros.
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